SANDRA

Hagamos el Amor | 1983

Créditos

«Quiero agradecer especialmente a Mariano Toledo (armónica en «Vuele bajo») // Víctor Morel (trompeta en «Milonga de un soldado» y flugell en «Habla el alma») // Patsy Crowley (coros en «María María»)
Tuvimos la enorme suerte de contar con la colaboración del maestro Rodolfo Mederos, (gracias CBS) quien en «A vos ciudad» nos dio todo lo que soñábamos para esa canción (y más también). GRACIAS!
Creo que no hay palabras para expresar lo que Amilcar hizo en este LP. Quizás él esté acostumbrado, nosotros no. Gracias por haber convertido nuestros sueños en realidad y haber bancado nuestros delirios e ineficiencias.
Amílcar Gilabert: Técnicos de sonido y mezcla y… Mucho más!
Las Bestias en vivo tienen dos integrantes más que no faltaron un solo minuto (Salvo alguno que otro sandwich de lomito en la esquina) de al lado de la consola: «Pichón» Dal Pont (Técnico de sonido en vivo) y Gabriel Alaniz (Coordinador de escenario en estudio ION)
Gracias Dany, asistente de Amílcar en ION
Declaro que todos hicimos coros, tomamos mate, comimos galletitas y nos pasamos largas horas nocturnas para hacer esto que hoy es, honestamente, lo mejor que tenemos. Chau, hasta siempre.»
 Sandra.

«PD1: Gracias Tita, Roberto y Miguel por permitirnos ensayar todo este LP en Shams.
PD2: Quiero dedicar la «Milonga de un soldado» a un hermoso amigo mío, Horacio Moraco, quien un día de enero me leyó un poema de Jorge Luis Borges.»

Arreglos e ideas: Sandra y La Bestias // Las Bestias son: Vane Mihanovich, teclados: // Damián Figueroa: guitarras // Enrique Quique Conte: bajo // Jorge Cacho Patrono: batería y percusión

Producción: Ricardo Kleiman // Grabado en Estudios ION // Editado y Distribuido por Microfon Argentina S.A. // Fabricado y Distribuido por RCA Limited [Suc. Argentina] // SUP-80.228 Estéreo ℗ 1983
Tiempo Total: 39’ 19’’

*Este mismo Disco tuvo una Versión #2: Se quietaron por problemas de derechos de autor los temas: «A Vos Ciudad» y «Milonga de Un Soldado». Se incluyó un nuevo tema: El juego de la vida (Autor: Sergio Mihanovich)

Letras

Quiero una vez
Y otra vez
Y otra mas

Hagamos el amor, amor
Al amanecer
Como el padre sol
Brillándonos
Una vez, y otra vez
Y otra mas

No iremos a dormir amor
Ni a vivir normal
Hoy que somos dos
Y hacemos Dios

Te daré poemas
De oro y luz
Violencia de mar
Mi sabor y mi olor
Toda mi humanidad

Quiero una vez
Y otra vez
Y otra mas

A vos ciudad
Hoy aquí te canto ahora
Y quiero en vos crecer
Y echar raíces
Que sean largas
Y te abarquen
Que te enrosquen
Y te aprieten
Nos abracen y acaricien
Y nos aten

A vos ,ciudad
Quiero asumirte
ante este mundo
pues sos , todas las fuerzas
en mis entrañas
toda el ansia
que encontré en aquella noche
y el amor que sonreí
esa madrugada

A vos ,ciudad
A vos que sos
Una boutique sofisticada
El barrio que no he conocido
Un golpe bajo
Un bienvenido trampolín
Que me devuelve siempre

A vos , ciudad
A vos que te amo tanto
A vos, te canto

A vos ,ciudad
Hoy aquí me planto ahora
Para aprender el dialecto
De mi gente
Y vibrando al sentir
Que soy tan tuya

Negro que vivís, cantando
Negro que vivís, soñando
Negro que cantas desnudo
Ahh, negro no sean tan
Volve

Voy a cantar…
Si vos no cantas , no va

Negro de linda sonrisa
Negro que corres deprisa
Negro , negro
No encontras hermanos

Voy a cantar…
Si vos no cantas , no va

Si ves que ya no sirve
Tu humildad
Porque seguís
Con esa paz, si te hace mal

Si ves que no consigues
La verdad
Busca un camino
Pero ya ni tendrás paz

Negro que vivís yugando
Negro que vivís luchando
Negro que luchas desnudo
Ahhh, negro , negro….
Volve

Volve a luchar
Si vos no luchas , no va…

El chico juega con el perro,
el perro juega co el pasto,
el paso juega con el viento,
y se va moviendo.

El chico tira la pelota,
el perro para las orejas,
y como quiere ir a buscarla,
ya se va corriendo.

El sol juega a su vez
con una rama bien florida,
también participando
en el juego de la vida.

El hombre juega en el arroyo,
espejo de su compañera,
y ella sabe que la van a acariciar,
y el cielo mira cuando empiezan a jugar.

Jugando, jugando,
hay que vivir jugando,
así la vida se va mejorando.
Jugando, jugando,
y siempre intercalando
el breve ayer, el hoy, el hasta cuando.

Misterio que sólo Dios sabrá,
la clave de la felicidad.

Jugando, jugando, jugando,
riendo y explorando,
sufriendo pero siempre esperando
vencer en este juego que es vivir.

María, María es un don, un poder,
una magia, una fuerza que nos alienta.

Una mujer que merece vivir y amar
como otra cualquier del planeta.

María, María es el son, el color, el sudor
es la dosis más fuerte y lenta
de alguien que quiere reír, cuando debe llorar
y no vive y está que revienta
Hay que tener mucha fuerza,
tener mucha raza,
tener muchas ganas, siempre
quien trae en el cuerpo esa marca.

María, María confunde dolor y alegría

Hay que tener mucha maña,
tener mucha gracia, tener fantasía siempre.
quien tiene la piel marcada
posee la extraña manía de creer en la vida,
lara la lara la he…..

Una tarde, un té frío, una espera
y esta casa buscando tú presencia…
te espero entre los discos,
los libros y la radio,
te espero como siempre te he esperado.

Quereme… como la tierra quiere al agua
quereme… como en el mar esa mañana
quereme… que las disculpas se han perdido
como perdida estoy sin vos, y tengo frío.
Vuelvo a calentar agua. Suena un timbre…
pero otras manos, otras puertas abren.

Volando en tu recuerdo
de pronto me di cuenta
que el agua se ha enfriado ya bastante
Quereme… mis pasos van por la vereda
quereme… sé que tu casa queda cerca
quereme… hay una luz en tu ventana
pero tu sombra está, mi amor, acompañada
Quereme… mis pasos van por la vereda
quereme… se que tu casa queda cerca
quereme… hay una luz en mi ventana
pero mi sombra está, mi amor, desamparada.

No crezca mi niño,
no crezca jamás
los grandes al mundo
le hacen mucho mal
El hombre ambiciona
cada día más
y pierde el camino
por querer volar
Vuele bajo,
porque abajo
está la verdad
Esto es algo
que los hombres
no aprenden jamás.

Por correr el hombre
no puede pensar
que ni el mismo sabe
para donde va
Segui siendo niño
y en paz dormiras
sin guerras
ni máquinas de calcular
Vuele bajo,
porque abajo
está la verdad.

Eso es algo
que los hombres
no aprenden jamás.

Dios quiera que el hombre
pudiera volver
a ser niño un día
para comprender
que está equivocado
si piensa encontrar
con una escopeta
la felicidad.

Vuele bajo
porque abajo
está la verdad
Esto es algo
que los hombres
no aprenden jamás

Habla el alma que hay en mi
La que ríe la que espera
La que se ira cuando muera
O me canse de vivir

Habla el alma que hay en mi
La que mira desde adentro
La que sabe cuando miento
Cuando sufro , y cuando soy feliz

Habla el cuerpo que hay en mi
El que sufre los errores
El que bajara escalones
Si no creo en lo que soy

Habla el alma que hay en mi
La que le enseña a mi cuerpo
Alejarse del infierno
Acercándome al amor

Y habla el tiempo que hubo en mi
Buenos y malos momentos
El que encontró serena
Componiendo esta canción

Estoy parada en el medio
de esta gran ciudad
no tengo rumbo ni dueño
solo busco mi identidad.

Libertad, libertad, yo te busco
donde quieras que estas.
Libertad, libertad, yo te busco
donde quieras que estas.

Estoy cambiando de a poco
creo que puedo mejorar
no me gusta hacerme rollos
pero a veces no lo puedo evitar.

Libertad, libertad, yo te busco
donde quieras que estas.
Libertad, libertad, yo te busco
donde quieras que estas.

Quiero encontrar, un camino
mi destino, escrito no esta.
Quiero construir un sendero
pero, pero me va a costar.

Yo canto lo que me gusta,
porque sino me siento mal
y también canto para ustedes
y recibo lo que me dan.

Libertad, libertad, yo te busco
donde quieras que estas.
Libertad. libertad, yo te busco
donde quieras que estas.

Lo he soñado en esta casa
entre paredes y puertas.
Dios les permite a los hombres
soñar cosas que son ciertas.

Lo he soñado mar afuera
en unas islas glaciales.
Que nos digan los demás
la tumba y los hospitales.

Una de tantas provincias
del interior fue su tierra.
(No conviene que se sepa
que muere gente en la guerra.)

Lo sacaron del cuartel,
le pusieron en las manos
las armas y lo mandaron
a morir con sus hermanos.

Se obró con suma prudencia,
se habló de un modo prolijo.
Les entregaron a un tiempo
el rifle y el crucifijo.

Oyó los vanos discursos
de los vanos generales,
que nos digan los demás
la tumba y los hospitales.

Oyó vivas y oyó mueras,
oyó el clamor de la gente.
El sólo quería saber
si era o si no era valiente.

Lo supo en aquel momento
en que le entraba la herida.
Se dijo “No tuve miedo”
cuando lo dejó la vida.

Su muerte fue una secreta
victoria. Nadie se asombre
de que me dé envidia y pena
el destino de aquel hombre.